Regreso al Presente

Fecha: 21 octubre 2015. Hora: las 14h del mediodía, temperatura: 20 grados al sol. Y solo os puedo expresar que: ¡Ya estamos en el futuro!

No puedo creer lo que advierten mis ojos. Estoy observando descender en el mismísimo centro de la concurrida ciudad todo un espectacular Delorean! Espera! veo abrirse su deslizante puerta lateral. Puedo distinguir un pequeño pie con unas modernas y futurista Nike de color blanco con robocordones ajustables, una cazadora roja, un… ¡toma ya! ¡Perdona! No puede ser, si es el mismísimo sagaz Marty Mcfly , dando tumbos por el cambio temporal espacio tiempo en mi propia ciudad y no en su materna Hill Valley, tal como predecía el popular film de finales de los 80!.

Pero siento decepcionaros, si esto fuera cierto fliparíamos todos en colores, por desgracia, no deja de ser la ilusión que nos regaló “Regreso al futuro” un histórico filme protagonizado por aquel entonces joven estrella Michael J. Fox y por el alocado Christopher Lloyd interpretando al visionario amigo doctor Doc Emmett Brown . Una película que gozó de buena salud a lo largo de cada una de sus tres partes y que marcó toda una época que permitió volar la imaginación y creer a toda una generación de niños, jóvenes y no tan jóvenes de ver cómo sería la tierra a 30 años vista.

Tanto el cine como la literatura siempre han sentido especial predilección por las aventuras fantásticas, llenas de energía, ritmo, tensión y sobre todo a rebosar de magia y ciencia ficción. A los ingeniosos artistas que trabajan con las palabras les ha gustado transpórtanos a universos fantásticos, mundos extraordinarios o vaticinar los artilugios y vidas más inverosímiles que podríamos especular. Nos han plantado en naves nodrizas recorriendo por infinidades de galaxias lejanas, nos han situado viviendo entre robots, nos hemos tele-transportado en extravagantes máquinas del tiempo y en mundos que ni el malogrado Steve Jobs hubiera supuesto. Y es en estás donde yo disfruto, aquellas en las que nos regalan y dibujan, como sería el futuro, sus ciudades, su gente y sus costumbres y si hay un filme que me inició en estos temas tan interesantes fueron las de las aventuras del tenaz Marty Mcfly. Y más concretamente cuando el célebre director Robert Zemeckis, su gran amigo y visionario Steven Spielberg junto a la inestimable ayuda del guionista Bob Gale llevaron los infortunios y desventuras de Mcfly hasta el 2015. Estos tres artífices del espectáculo hicieron que en 1985 emplazaran el contador del tiempo a 21 de octubre del año 2015  para intentar que sus descendientes no sufrieran un catastrófico destino… y ese día ha tardado en llegar pero mira por donde, ¡voila! es el día en el que nos encontramos hoy; un mundo aparentemente muy distinto al que vivimos en el presente.

En esta segunda entrega que estos días está en boca de todas le acompañó todo un sinfín de tecnologías y «gadgets» que por aquel entonces parecían sacadas de la chistera de los sueños más inverosímiles de algún mocoso chaval con una gran imaginación o de los científicos más avispados. En muchas cosas han acertado, como si asombrosamente hubieran tenido un chivato o un Delorean para ir dando tumbos por el espacio-tiempo. Como ejemplo tenemos los Cine en 3D, las gafas de realidad virtual, las pantallas de Tv planas, las Tv con Smart, y las videoconferencias al más puro estilo Skype, tenemos modelos de drones no para hacer espionaje sino en esta ocasión para pasear perros. Otras sin embargo, como los coches voladores con sus respectivas carreteras aéreas, la publicidad tridimensional, las zapatillas autoajustables, las chaquetas ajustables con secador, y el emblemático monopatín volador se han quedado de momento en fase de espera para un futuro esperemos que no muy lejano . Destaca la nula presencia de objetos que arrasan en la vida actual que por entonces ni se planteaban , algo tan obvio a día de hoy como el teléfono móvil no tiene presencia en el futuro del mítico film ni por supuesto los rudimentarios palos selfies y mucho menos las redes sociales estilo Facebook, Instagram y semejantes.

Las grandes marcas e identidades que salían en el film han puesto de su parte para que Marty, Doc y compañía se encuentre como en su casa.

Nike, ha llegado a registrar una patente de las zapatillas Nike MAG 2015, pero aún no están ni se prevé que estén pero si han sacado unas reproducciones que a la vista dan el pego pero que no son ajustables. Lo que sí se puede adquirir ya a partir de hoy es la botella Pepsi Perfect, con un envase idéntico al de la película. Que de buen seguro hará las delicias de los fans y no fans de Mcfly.

Y como dato curioso la productora Universal Pictures ha lanzado el tráiler de Tiburón 19, película de estreno en aquel futuro irreal. Todo para que la magia de “Regreso al futuro” persista en tal célebre fecha. Y como le decía Doc nada más llegar «sácate los bolsillos del pantalón. Que será lo que se lleve en el 2015» pues eso, sácate los bolsillos y siéntete Mcfly por un día.

Siempre he deseado decir esta frase: recuerda lector de RCBcn que donde vamos no necesitamos de carreteras, o tal sí. Así que abróchense el cinturón, que para saltar el factor espacio/tiempo tenemos que soltar el freno y alcanzar los 140 km/H.