Milano se prepara para acoger los lienzos de Manet y otros artistas del periodo. La exposición tenía que ser en Torino (una producción de manos de Skira, con el Musée d’Orsay) pero debido a una falta de acuerdos y afortunadamente para nosotros que tenemos relación directa con la capital lombarda, llegará al Palazzo Reale durante la primavera del 2017, entre los meses de marzo y abril, a todos los amantes del arte, nos espera una gran exposición sobre el pintor y grabador Édouard Manet ,(1832-1883).
Hablamos de un pintor que nunca dejó de sentirse atraído, y rechazado, por los críticos y los organismos oficiales del arte. No era un bohemio, su ideal no era entregarse a las pasiones y vivir con lo puesto. Al mismo tiempo, era incapaz de resignarse a encajar en lo que muchos querían que hiciera. Lo afectaban profundamente las duras críticas sobre sus cuadros, pero volvía, con la cabeza agachada, a intentar ser aceptado de nuevo.
Al contrario que otros artistas de su generación, como Edgar Degas o Paul Cézzane, creía que exponer en el Salón de París (la exposición oficial de arte de la Academia de Bellas Artes de París) era a lo que debía aspirar un artista y relegaba a un segundo plano a los circuitos independientes. Pero las pinturas hablaban por él y lo defienden ahora como un creador inamovible: Manet no quería sacrificar nada para llegar a la fama.
Sólo al final de su vida consiguió vencer la resistencia de la crítica, el gran demonio que no dejaba de atormentarlo, pero que nunca consiguió domar su revolución interior.
la comisarios de la exposición son Caroline Mathieu e Isolde Pludermacher. la ciudad de Milano ya había colaborado el año pasado con el Musée d’Orsay en la exposición sobre Wildt.
Hasta la fecha y si no cambia, el título de la exposición es “Manet, la Parigi moderna” y quiere representar un punto de referencia que ayude a hacer una reflexión sobre capitale francesa. Los cuadros que se mostrarán serán alrededor de cincuenta: gran parte de Manet, pero algunos otros de artistas como Renoir y Degas que en sus obras también cuentan la transformación de Paris.
Palazzo Reale
Piazza del Duomo, 12,
Milano, Italia
